Pérdidas e incertidumbre, lo que le ha dejado el Covid19 a Santa Elena

Por VIVIENDO SANTA ELENA*
Gloria** tiene un pequeño alojamiento. Antes de la pandemia y con los sueños 2020 intactos y todos los ánimos, trabajaba con juicio para ampliarlo, “porque el año pintaba bien”, dice con tristeza. “Teníamos unas cuatro o cinco reservas a la semana. La gente que nos ocupa ha sido muy empática porque, en lugar de cancelar, movieron sus fechas o han hecho pagos parciales o totales y dejaron abiertas las reservas para cuando se pueda abrir. Otras personas sí cancelaron y nos tocó devolverles el dinero, lo cual es muy duro cuando uno no está recibiendo nada. Teníamos préstamos que se congelaron mientras tanto, pero el nivel de incertidumbre es algo que nos quita el sueño”, afirma. Y agrega que mientras se puede abrir, se preparan con los protocolos de bioseguridad para hacer más segura la estadía de sus clientes cuando sea posible volverlos a recibir.
Esta es sólo una historia de las 2 mil familias que, según datos recopilados por la Red de Turismo de Santa Elena -que agrupa a 12 sectores de la economía del territorio-, desempeñan labores relacionadas con el turismo en los distintos negocios. Si se hace un promedio de cuatro personas por familia, son 8 mil habitantes los que hoy sufren por la crisis generada por el Covid19 en un territorio de 21.228 habitantes (según las proyecciones del censo del Dane 2019). Esto significaría que aproximadamente el 37.6% de la población vive de actividades económicas relacionadas con el turismo.
Sin embargo, el impacto económico en Santa Elena de cuenta del Covid19 no se queda ahí. Hay infinidad de pequeños alojamientos, restaurantes, cafés, ‘tardeaderos’, sitios para el turismo de bienestar y salud, o turismo de contemplación y adicionalmente todo lo que se mueve alrededor de estos como tiendas, misceláneas, ferreterías o depósitos, comidas rápidas, ventas callejeras, artesanías y todo tipo de productos trasformados, además de transportadores formales e informales, agricultores, floricultores y servicios también.
Según cálculos de la Red de Turismo de Santa Elena, el impacto en términos económicos para el territorio, en este tiempo comprendido entre el 21 de marzo y el 26 de mayo (67 días), alcanza una cifra de 25 mil millones de pesos que se han dejado de percibir por la parálisis (ver imagen #1). Esto, aclarando que no hay un inventario actualizado de los prestadores de servicios turísticos del territorio, la oferta cambia constantemente y es fluctuante (unos nacen, otros desaparecen, algunos se reinventan con nombres y actividades nuevas) y no hay datos oficiales actualizados desde la Alcaldía de Medellín. Y reiterando que se trata de cálculos tímidos, el impacto puede ser más alto en términos económicos.

Cortos
Por su parte, las cifras calculadas por la Administración Municipal en relación con el impacto, se quedan cortas. Según la subsecretaria de Turismo de la Alcaldía de Medellín, Ledys López, el cálculo que esa dependencia hizo habla de apenas 700 personas que estarían perjudicadas por la parálisis de las actividades turísticas en Santa Elena. Informó que, en la ciudad, las actividades de los restaurantes cayeron en un 85% (el 15% restante es lo que realizan a través de los domicilios), los alojamientos disminuyeron actividades en el 95% y las ferias y eventos en el 100%.

Un año complejo
El impacto económico en Santa Elena es doloroso, según términos de personas con pequeños emprendimientos o negocios de transformación o artesanías, pues la emergencia los puso en situación de vulnerabilidad. Además, el regreso no está garantizado y hay mucha incertidumbre sobre el nuevo escenario.
Según los datos entregados por la Red de Turismo de Santa Elena, por la crisis, la empresa transportadora está dejando de movilizar alrededor de 28 mil pasajeros/mes, lo cual se complementa con el cable Arví, por donde llegaban alrededor de 85 mil visitantes/mes. Para este sector lo que se ha dejado de percibir es alrededor de 2.800 millones de pesos.
En relación con alojamientos, calculando un promedio de 50 negocios (son más), están dejando de recibir alrededor de 75 mil ocupantes/mes, con unas pérdidas cercanas a los 7.500 millones de pesos. Para el sector gastronómico, considerando que fueran 50 (también son más), han tenido pérdidas por $1.400 millones. Este sector, aunque golpeado, ha podido seguir trabajando mediante plataformas electrónicas y domicilios mientras el Gobierno Nacional permite abrir. Para el caso de las Fincas Silleteras, que según cálculos de la Corporación de Silleteros de Santa Elena, COSSE, son las 12 adscritas a la entidad de manera oficial y otras 20 que trabajan de manera independiente, han dejado de recibir aproximadamente 400 visitantes/mes, lo cual representa pérdidas cercanas a los 360 millones de pesos durante este tiempo de aislamiento. Aquí hay que enfatizar también que, alrededor del 80% de los silleteros adscritos a la COSSE, reciben sus ingresos de la venta de flores y verduras en plazas, parques y mercados de la ciudad, lo cual también agrava la crisis para ellos. Siguiendo con los cálculos, otros sectores relacionados con el turismo y en general con negocios abiertos al público, comercio en general, tiendas, misceláneas, artesanos y transformadores, la Red calcula que las pérdidas son de $12.940 millones.

Esto da un total aproximado de $25 mil millones como la cifra del impacto económico (lo que ha dejado de ganar) para el territorio de Santa Elena, en 67 días de parálisis por el Covid19. Hay que insistir en que, es tal vez una cifra inferior a la real, teniendo en cuenta la ausencia de datos exactos consolidados y actualizados de todos los prestadores de servicios turísticos.
Este dato, el panorama y la incertidumbre a nivel mundial hacen más confusa la espera. Si a esto se le suma que hoy, 28 de mayo, cuando en otros años para esta fecha ya estaba adelantada la programación de Feria de Flores, Santa Elena tiene la incertidumbre clavada en el alma, porque este año no habrá agosto para recuperar la economía local. Además de que este año no podrán realizarse eventos masivos y eso elimina varias actividades en el corregimiento, por obvias razones, aún no se sabe qué se hará para Feria. Lo único que se sabe es que el alcalde de Medellín, Daniel Quintero Calle, anunció, justo hace un mes, que sí se hará. Toca esperar.

**Nombre cambiado para proteger la identidad de la fuente, pero puede ser cualquier pequeño empresario de Santa Elena.

*Medio de Comunicación con 21 años de trayectoria periodística en el territorio de Santa Elena, ganador de varios reconocimientos y premios de periodismo local.