La primera comunidad energética solar de Colombia está en Medellín

Por Ibeth Cristina Cortés Mesías*

Fotos Cortesía EPM
El barrio El Salvador hace historia en el proceso de transición energética del país, al ser pionero de un nuevo modelo de prestación del servicio de energía, que apunta entre otras cosas, al cuidado del medio ambiente y a la disminución del costo del servicio de energía.
Son 24 familias del sector que se convirtieron en las primeras micro-productoras de energía solar en Colombia, recurso que no solo usarán para ellas, sino que además podrán venderlo a la red pública, lo que les permitirá ahorrar dinero en el consumo del servicio, al tiempo que generarán ingresos por distribuirlo.
Este proyecto, liderado por Empresas Públicas de Medellín (EPM), Universidad EIA, ERCO Energía y NEU Energy, permite “convertir la transición energética, que muchas veces es vista como si fuera en la estratosfera, en una oportunidad de vida, de ingresos y de eficiencia en el uso de energía en cada una de las familias y eso vale más que cualquier otra cosa”, manifestó el rector de la Universidad EIA, José Manuel Restrepo, quien además dijo que este logro no es un tema solo de Medellín, Antioquia o Colombia, sino que se está viendo como experiencias de éxito en otras partes del mundo, al contar con el apoyo de la Real Academia de Ingeniería del Reino Unido y de University College London.

¿Cómo funciona?
ERCO Energía instaló dos sistemas solares, uno de 15.98 kilovatios pico (kWp) y otro de 4.2 kWp, para un total de 20 kWp en dos viviendas, que incluyen 43 paneles solares que se encuentran en los techos de tres casas, los cuales generan, en promedio, hasta 3.000 kilovatios (kWh) por mes. Pero éstos no atienden únicamente los lugares donde fueron instalados, sino que la energía producida puede distribuirse directamente al Sistema Interconectado Nacional (SIN).
Los usuarios cuentan con un medidor inteligente, para conocer el consumo energético, monitorearlo en tiempo real y tomar decisiones al respecto.

Beneficios para la comunidad
Las empresas que lideran el proyecto reconocen que para el éxito de esta iniciativa ha sido importante la participación y disposición de la gente del barrio El Salvador. Así mismo, los representantes y líderes del sector manifestaron su agradecimiento por todo lo que este proyecto representa para su comunidad, no sólo por las bondades económicas que implica -al generar ahorros en su factura de electricidad o ingresos por vender el servicio-, sino también por los conocimientos que han adquirido a través de las capacitaciones, principalmente en términos de tecnología y uso racional de energía.
Además, señalan que con este proyecto se fortalecieron lazos de amistad, unión y respeto entre ellos y también reconocen el gran aporte al cuidado al medio ambiente.
“Nos motivó la parte económica, nos dijeron que se iba a mermar el tema del costo de la energía y también ser los pioneros de este proyecto nos ha ayudado mucho a la integración de esta cuadra, hemos sido muy unidos”, dijo María Elena Ravel, habitante y lideresa de El Salvador.

Un modelo para replicar
Darío Amar Flórez, vicepresidente ejecutivo de Nuevos Negocios, Innovación y Tecnología de EPM, expresó el orgullo que siente por que se logró el objetivo del proyecto, crear la primera comunidad energética solar de Colombia que, según él, cuenta con tecnología de punta y con la alianza de empresas altamente calificadas, que permitieron lograr un “piloto funcional” donde la comunidad es lo más importante. Y agregó: “se hizo porque creímos en una red de co-innovación con el ecosistema de Medellín, que es distinto y se facilita. Como ésta pueden venir muchas más. Seguramente lo van a querer copiar”.

*Practicante de Periodismo de la Universidad de Antioquia.