Un buen paso
Con todas las dificultades que hoy vive el corregimiento, especialmente las relacionadas con los agrietamientos y averías que se presentan en la parte central y originaron el cierre preventivo y evacuación de la iglesia, tres viviendas y locales vecinos (23 de marzo) y con la preocupación por aparición de averías en distintos sectores de Santa Elena, es apenas lógico que la comunidad esté preocupada. Un ambiente de zozobra recorre el corregimiento y muchos se preguntan a qué se debe el panorama, en medio de muchas especulaciones. Angustia porque salir de la casa que se ha habitado durante tantos años no es fácil, mucho menos para un albergue (como cualquier otro desplazado de la ciudad) como bien ofrece la Alcaldía de Medellín a las personas afectadas por eventos similares. Tristeza, si se es adulto mayor, porque el hogar de los ancestros está averiado, a punto de caer, con grietas que no se sabe (hoy) si es mejor refaccionar y cubrir o demoler la casa completa. Tristeza y desasosiego, por el negocio que se intenta sacar adelante con no pocos esfuerzos y toca desalojar también por el riesgo que representan las fisuras. Dolor, con la iglesia, edificación tradicional, con más de 80 años, construida por la comunidad a pulso y con mucho esfuerzo y que no pudo ser ocupada durante la reciente Semana Santa. Eso hoy nos debe doler A TODOS como corregimiento. Por eso, nosotros como medio de comunicación insistimos que, no sólo para esto sino para cualquier cosa que pase en el territorio de Santa Elena, #SantaElenasomostodos. Nadie debe quedarse por fuera de alegrías, pero también de penurias y asumir que lo que hoy le pasa a un sector, mañana puede pasarle a otro y por eso es necesaria la solidaridad, llamado que no nos cansaremos de hacer.
Por eso es de resaltar la iniciativa que se concretó en la semana que termina, de conformar una mesa de trabajo articulada por la comunidad afectada por este asunto de las grietas y averías. El pasado 4 de abril, representantes de la Administración Municipal (Corregiduría, Departamento Administrativo de Gestión del Riesgo de Desastres -DAGRD-, secretarías de Cultura y Gestión y Control Territorial), Departamento Administrativo de Gestión del Riesgo del Departamento (DAPARD), Gobernación de Antioquia, la Concesión Túnel Aburrá Oriente, Corantioquia y Cornare, con representantes de la comunidad afectada, conformaron esta mesa de trabajo para poner en marcha todas las estrategias que sean necesarias para superar la situación. La idea es que las entidades estatales harán los respectivos estudios, análisis, investigaciones para hallar respuestas sobre las causas de las grietas y poder definir acciones de contingencia o de mitigación (en caso de que sea necesario) para apoyar a las familias y grupos afectados. Es un buen paso, siempre y cuando se definan también responsables de los hechos que hoy tienen a Santa Elena en estado de zozobra y alerta, pues para nadie es un secreto que pueden ser muchas las causas, pueden haber confluido todas en la parte central, sin embargo, hay grietas en otros sectores y veredas alejados de la centralidad que no están cercanas ni al alcantarillado, ni a la Casa de la Cultura, ni tienen aguas perdidas. La responsabilidad no se puede diluir ni esfumar y tendrá que ser verificada con estudios serios, técnicos y con un alto criterio ético (esperemos que sí). Tengan la certeza de que nosotros como medio de comunicación, que venimos advirtiendo tantos temas desde 2010, estaremos atentos. Y, hoy, cuando hay efectos visibles y tangibles, la comunidad también lo está, no lo duden.